Salmo 112

Salmo 112

Prosperidad del que teme al Señor

1¡Aleluya![#112:1 O, ¡Alabad al Señor!; heb., Alelu-Yah]

Cuán bienaventurado es el hombre que teme al Señor ,

que mucho se deleita en sus mandamientos.

2Poderosa en la tierra será su descendencia;[#112:2 Lit., simiente]

la generación de los rectos será bendita.

3Bienes y riquezas hay en su casa,

y su justicia permanece para siempre.

4Luz resplandece en las tinieblas para el que es recto;

Él es clemente, compasivo y justo.

5Bien le va al hombre que se apiada y presta;

arreglará sus asuntos con juicio.

6Porque nunca será sacudido;

para siempre será recordado el justo.

7¶No temerá recibir malas noticias;

su corazón está firme, confiado en el Señor .

8Su corazón está seguro, no temerá,

hasta que vea vencidos a sus adversarios.

9Con liberalidad ha dado a los pobres;[#112:9 Lit., Ha esparcido]

su justicia permanece para siempre;

su poder será exaltado con honor.

10¶Lo verá el impío y se irritará;

rechinará los dientes y se consumirá;

el deseo de los impíos perecerá.

1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation
Published by: The Lockman Foundation