Salmos 108

Salmos 108

Con tu ayuda, saldremos victoriosos

SALMO 108 (107)

11 (2) Dios mío,

mi corazón está dispuesto

a cantarte himnos.

22 (3) ¡Voy a despertarme!

¡Despertaré al arpa y a la lira!

¡Despertaré al nuevo día!

33 (4) Dios mío,

yo te alabaré entre los pueblos;

te cantaré himnos entre las naciones.

44 (5) Tan grande y constante es tu amor

que llega hasta los cielos.

55 (6) Tú, mi Dios,

sobrepasas los cielos;

¡eres tan grande que cubres toda la tierra!

66 (7) Nosotros te somos fieles:

¡respóndenos!

¡Sálvanos con tu poder!

Así este pueblo que amas

quedará a salvo.

77 (8) Desde tu templo has declarado:

«Cuando yo triunfe,

repartiré entre mi pueblo

las tierras de Siquem

y las del valle de Sucot.

88 (9) Las tierras de Galaad son mías;

al norte están las tribus de José

para proteger a mi pueblo,

y en Judá he puesto al rey.

99 (10) Los de Moab son mis esclavos,

Edom es mi propiedad,

y en territorio filisteo

lanzo gritos de victoria».

1010 (11) ¿Quién quiere llevarme

hasta la ciudad con muros?

¿Quién quiere enseñarme

el camino que lleva a Edom?

1111 (12) ¡Tú, Dios mío,

te has alejado de nosotros

y ya no sales a pelear

al frente de nuestros ejércitos!

1212 (13) La ayuda humana resulta inútil;

¡ayúdanos a vencer al enemigo!

1313 (14) Dios nuestro, tú los vencerás;

¡con tu ayuda saldremos victoriosos!

Traducción en lenguaje actual ® © Sociedades Bíblicas Unidas, 2002, 2004.
Published by: United Bible Societies