Eclesiastés 6

Eclesiastés 6

1En este mundo hay otro mal muy común entre los hombres, según he podido ver:

2Dios les da a algunos abundantes riquezas y esplendor, y nunca les falta nada de lo que desean; pero no les permite gozar de todo ello, sino que otros lo disfrutan. ¡Esto es también una ilusión vana y realmente lamentable![#6.2 ya sea a causa de enfermedad o de muerte prematura. Cf. Lc 12.20.; #6.2 Sal 39.6(7).]

3Un hombre puede tener cien hijos y vivir muchos años; pero por mucho que viva, si no disfruta completamente de lo bueno, y si ni siquiera recibe sepultura, yo sostengo que un niño abortado vale más que ese hombre.[#6.3 En el antiguo Israel se consideraba que los muchos hijos eran una de las mejores bendiciones divinas. Cf. Dt 28.11; Job 1.2; Sal 127.3-5; 128.3,6; Pr 17.6; 31.28.; #6.3 Véase Jer 7.33 n.]

4Pues aunque ese niño se pierda en la nada, en la oscuridad, donde su nombre quedará ignorado,

5y aunque no llegue a ver el sol ni a saber nada, al menos habrá tenido más descanso que aquel hombre,[#6.5 es decir, gozar de la vida en este mundo, donde la luz es agradable (Ec 11.7), en oposición al sheol o Reino de los muertos (véase Sal 6.5[6] n.), donde los días de oscuridad serán numerosos (Ec 11.8). Véase Reino de la muerte en el Índice temático .]

6el cual podría haber vivido dos mil años y, sin embargo, no disfrutar de sus bienes. Y al fin de cuentas, ¡todos van al mismo lugar![#6.6 Cf. Ec 2.15-16; 3.19-20; 9.5-6.]

7El hombre trabaja y trabaja para comer, pero nunca queda satisfecho.

8¿Qué tiene el sabio que no tenga el necio, a no ser sus conocimientos para hacerle frente a la vida?[#6.8 traducción probable. Heb. ¿Qué tiene el pobre que sabe...?; #6.8 otra posible traducción: ¿Qué tiene el sabio, qué tiene el pobre que saber (para) hacerle frente a la vida, que no tenga el insensato?]

9Vale más lo que uno ve que lo que se imagina. Pero también esto es vana ilusión, es querer atrapar el viento.[#6.9 traducción probable. Este v. parece sugerir que lo más conveniente es aprovechar las oportunidades que están al alcance de la mano, sin dejarse arrastrar por deseos ilusorios o inalcanzables.]

10Lo que ahora existe, hace mucho que recibió su nombre, y se sabe cuál es. Nadie puede luchar con quien es más poderoso que él.[#6.10 Véase Sal 8.1(2) nota.]

11Una cosa es cierta: donde abundan las palabras, abundan los disparates; y nada se gana con eso.

12De hecho, nadie sabe lo que es mejor para el hombre durante los contados días de esta vana ilusión que es su vida. Sus días pasarán como una sombra, ¿y quién podrá decirle lo que ha de ocurrir en este mundo después de su muerte?[#6.12 La imagen de la sombra, referida a la fugacidad de la vida humana, aparece con frecuencia en la Biblia. Cf. Job 8.9; 14.2; Sal 39.5-6(6-7); 102.11(12); 109.23; Ec 8.13.]

Texto © Sociedades Bíblicas Unidas, 1994.
Published by: United Bible Societies