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1Cumplir la ley es como hacer muchas ofrendas,
observar los mandamientos es ofrecer un sacrificio salvador.
2Ser agradecido es como ofrecer flor de harina;
socorrer al necesitado, como ofrecer sacrificios de alabanza.
3Apartarse del mal complace al Señor,
alejarse de la injusticia repara los pecados.
4No te presentes con las manos vacias ante el Señor,
pues está mandado que se hagan estas cosas.
5La ofrenda del justo ennoblece el altar,[#35,5: Lit. , expresión semita para indicar abundancia o riqueza.]
su aroma llega a la presencia del Altísimo.
6El Señor acepta el sacrificio del justo
y no echa en olvido su ofrenda memorial.
7Da gloria al Señor siendo generoso[#35,7: Lit. .]
y no seas mezquino al presentar tus primicias.
8Siempre que des algo, pon buena cara
y paga los diezmos con ánimo alegre.
9Como el Altísimo te ha dado,
así deberá ser tu respuesta:
con generosidad y según te sea posible,
10porque el Señor es buen pagador,
y te pagará hasta siete veces más.
11No intentes sobornar al Señor, pues no lo soportará;
no trates de ampararte en sacrificio injusto,
12porque el Señor es un juez imparcial
que no entiende de favoritismos:
13no retira su mirada del pobre
ni desoye la súplica del oprimido;
14no desatiende las quejas del huérfano
ni las palabras entrecortadas de la viuda.
15¿No ven cómo ruedan las lágrimas
por el rostro afligido de la viuda,
clamando contra aquel que las provoca?
16El Señor acoge a quien le sirve de buen grado;
sus peticiones llegarán a su destino ,
17pues la súplica del humilde traspasa las nubes
y no se detiene hasta alcanzar la meta;
18no desiste hasta que el Altísimo lo atiende
juzgando y haciendo justicia a los justos.
19En cuanto al Señor, no va a demorarse más
ni va a tener más paciencia con los impíos:
20triturará a los despiadados
y se vengará de los paganos;
21extirpará el tropel de los insolentes
y hará trizas el poder de los malvados;
22dará a cada uno según lo que haya hecho
y retribuirá a cada persona según sus intenciones;
23hará entonces justicia a su pueblo
y lo colmará de alegría con su misericordia.
24Es preciosa su misericordia en tiempos de aflicción,
como las nubes cargadas de lluvia en tiempos de sequía.