Salmos 88

Salmos 88

SALMO 88 (87)

Señor, ¿por qué me desprecias?

11 (2) Señor, mi Dios y Salvador,

día y noche te pido ayuda,

22 (3) ¡acepta mi oración!,

¡atiende a mi plegaria!

33 (4) Tanto es el mal que ha caído sobre mí,

que me encuentro al borde de la muerte;

44 (5) ¡ya me pueden contar entre los muertos,

pues me he quedado sin fuerzas!

55 (6) Estoy abandonado entre difuntos;

soy como los que han muerto en combate

y ya han sido enterrados;

como los que han perdido tu protección

y ya han sido olvidados por ti.

66 (7) Me has echado en lo más hondo del hoyo,

en lugares oscuros y profundos.

77 (8) Has descargado tu enojo sobre mí,

¡me has hundido bajo el peso de tus olas!

88 (9) Has hecho que mis amigos me abandonen;

me has hecho insoportable para ellos.

¡Soy como un preso que no puede escapar!

99 (10) De tanto llorar me estoy quedando ciego.

¡Todos los días clamo a ti, Señor,

y a ti levanto las manos!

1010 (11) ¿Acaso harás milagros por los muertos?

¿Acaso podrán los muertos darte gracias?

1111 (12) ¿Acaso se hablará de tu verdad y de tu amor

en el sepulcro, en el reino de la muerte?

1212 (13) En las sombras de la muerte, donde todo se olvida,

¿habrá quién reconozca tu rectitud y maravillas?

1313 (14) Pero yo, Señor, a ti clamo;

de mañana elevo a ti mi oración.

1414 (15) ¿Por qué me desprecias, Señor?

¿Por qué te escondes de mí?

1515 (16) Desde los días de mi juventud

he estado afligido y al borde de la muerte;

he soportado cosas terribles de tu parte,

y ya no puedo más.

1616 (17) Tu furor terrible ha pasado sobre mí,

y me ha vencido;

1717 (18) me rodea por completo a todas horas,

como una inundación.

1818 (19) Has alejado de mí amigos y compañeros,

y ahora solo tengo amistad con las tinieblas.

Texto © Sociedades Bíblicas Unidas, 1994.
Published by: United Bible Societies