San Mateo 2

San Mateo 2

La visita de los sabios del Oriente

1Jesús nació en Belén, un pueblo de la región de Judea, en el tiempo en que Herodes era rey del país. Llegaron por entonces a Jerusalén unos sabios del Oriente que se dedicaban al estudio de las estrellas,[#2.1 situado a corta distancia al sur de Jerusalén; pueblo natal del rey David (1 S 16.1). Cf. Lc 2.4-7.; #2.1 llamado el Grande, rey de todo el territorio de Israel dominado por los romanos; gobernó durante los años 37-4 a.C. Fue padre de Arquelao (véase Mt 2.22 n.), de Herodes Antipas (véase Mt 14.1 n.) y de Filipo (cf. Lc 3.1). La referencia a Herodes (cf. también Lc 1.5) permite fijar el nacimiento de Jesús hacia los años 6-5 a.C. El calendario actual, por un error de cálculo, colocó el comienzo de la era cristiana varios años más tarde.; #2.1 Lit. magos, término referido aquí a personajes de un país oriental no especificado, que estudiaban los astros y veían en ellos signos del curso de la historia humana. El texto no dice cuántos eran los magos. Éstos representan anticipadamente a los pueblos no judíos que reconocerán a Jesús como el Mesías.]

2y preguntaron:

—¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Pues vimos salir su estrella y hemos venido a adorarlo.

3El rey Herodes se inquietó mucho al oír esto, y lo mismo les pasó a todos los habitantes de Jerusalén.

4Mandó el rey llamar a todos los jefes de los sacerdotes y a los maestros de la ley, y les preguntó dónde había de nacer el Mesías.[#2.4 expertos conocedores de la ley de Moisés y de las Escrituras hebreas en general; véase Introducción al NT (30) .; #2.4 Véase Mt 1.17 nota.]

5Ellos le dijeron:

—En Belén de Judea; porque así lo escribió el profeta:

6“En cuanto a ti, Belén, de la tierra de Judá,

no eres la más pequeña

entre las principales ciudades de esa tierra;

porque de ti saldrá un gobernante

que guiará a mi pueblo Israel.”

7Entonces Herodes llamó en secreto a los sabios, y se informó por ellos del tiempo exacto en que había aparecido la estrella.

8Luego los mandó a Belén, y les dijo:

—Vayan allá, y averigüen todo lo que puedan acerca de ese niño; y cuando lo encuentren, avísenme, para que yo también vaya a rendirle homenaje.

9Con estas indicaciones del rey, los sabios se fueron. Y la estrella que habían visto salir iba delante de ellos, hasta que por fin se detuvo sobre el lugar donde estaba el niño.[#2.9 otra posible traducción: habían visto en el oriente .]

10Cuando los sabios vieron la estrella, se alegraron mucho.

11Luego entraron en la casa, y vieron al niño con María, su madre; y arrodillándose le rindieron homenaje. Abrieron sus cofres y le ofrecieron oro, incienso y mirra.[#2.11 sustancias aromáticas finas, principalmente de Arabia.]

12Después, advertidos en sueños de que no debían volver a donde estaba Herodes, regresaron a su tierra por otro camino.

La huida a Egipto

13Cuando ya los sabios se habían ido, un ángel del Señor se le apareció en sueños a José, y le dijo: «Levántate, toma al niño y a su madre, y huye a Egipto. Quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo.»

14José se levantó, tomó al niño y a su madre, y salió con ellos de noche camino de Egipto,

15donde estuvieron hasta que murió Herodes. Esto sucedió para que se cumpliera lo que el Señor había dicho por medio del profeta: «De Egipto llamé a mi Hijo.»[#2.15 La cita es de Os 11.1, que se refiere al pueblo de Israel como hijo del Señor (cf. Ex 4.22). Dios había hecho volver de la esclavitud de Egipto a «su hijo» Israel; ahora Jesús, «su Hijo» por excelencia, también había estado exiliado en aquel mismo país. Véase Mt 1.22 n.]

Herodes manda matar a los niños

16Al darse cuenta Herodes de que aquellos sabios lo habían engañado, se llenó de ira y mandó matar a todos los niños de dos años para abajo que vivían en Belén y sus alrededores, de acuerdo con el tiempo que le habían dicho los sabios.[#2.16 La estrella pudo haber aparecido a los sabios casi dos años antes; cf. v. 7.]

17Así se cumplió lo escrito por el profeta Jeremías:

18«Se oyó una voz en Ramá,

llantos y grandes lamentos.

Era Raquel, que lloraba por sus hijos

y no quería ser consolada

porque ya estaban muertos.»

La familia se establece en Nazaret

19Pero después que murió Herodes, un ángel del Señor se le apareció en sueños a José, en Egipto, y le dijo:

20«Levántate, toma contigo al niño y a su madre, y regresa a Israel, porque ya han muerto los que querían matar al niño.»[#2.20 Cf. Ex 4.19-20.]

21Entonces José se levantó y llevó al niño y a su madre a Israel.

22Pero cuando supo que Arquelao estaba gobernando en Judea en lugar de su padre Herodes, tuvo miedo de ir allá; y habiendo sido advertido en sueños por Dios, se dirigió a la región de Galilea.[#2.22 hijo de Herodes el Grande; después de la muerte de éste, gobernó en Judea, Samaria e Idumea del 4 a.C. al 6 d.C.]

23Al llegar, se fue a vivir al pueblo de Nazaret. Esto sucedió para que se cumpliera lo que dijeron los profetas: que Jesús sería llamado nazareno.[#2.23 Lc 2.39,51; Jn 1.45. En aquel tiempo Nazaret era un pueblo de poca importancia, en las montañas de Galilea.; #2.23 No hay ningún pasaje en el AT que tenga la forma de esta cita; Mateo parece hacer alusión a Jue 13.5,7, que habla del nazareo (o nazireo ), o posiblemente a Is 11.1, que habla del retoño (heb. ).]

Texto © Sociedades Bíblicas Unidas, 1994.
Published by: United Bible Societies