Salmos 2

Salmos 2

SALMO 2

Tú eres mi hijo

1¿Por qué se alborotan los pueblos paganos?

¿Por qué hacen planes sin sentido?

2Los reyes y gobernantes de la tierra

se rebelan, y juntos conspiran

contra el Señor y su rey escogido.,

3Y gritan:

«¡Vamos a quitarnos sus cadenas!

¡Vamos a librarnos de sus ataduras!»

4El Señor, el que reina en el cielo,

se ríe de ellos;

5luego, enojado, los asusta;

lleno de furor les dice:

6«Ya he consagrado a mi rey sobre Sión, mi monte santo.»[#2.6 era el nombre de la fortaleza que David arrebató a los jebuseos para hacerla capital de su reino (2 S 5.7). Luego, ese mismo nombre se aplicó a la colina situada un poco más al norte, donde Salomón construyó el templo del Señor (cf. Sal 78.68-69), y también pasó a designar toda la ciudad de Jerusalén (cf. Sal 48.12-14 [13-15]). Los salmos aluden constantemente a Sión y a su templo, y lo llaman monte santo porque el Señor lo ha elegido para vivir allí (Sal 132.13). Véase Sión en el Índice temático .]

7Voy a anunciar la decisión del Señor:[#2.7 Lit. el decreto del Señor. Posible referencia al documento que establecía las prerrogativas del rey en el día de su entronización.]

él me ha dicho: «Tú eres mi hijo;

yo te he engendrado hoy.

8Pídeme que te dé las naciones como herencia

y hasta el último rincón del mundo en propiedad,

y yo te los daré.

9Con cetro de hierro destrozarás a los reyes;[#2.9 El cetro es la insignia del poder real, que incluye el gobierno de la comunidad, el mando militar y la responsabilidad de administrar justicia. Cf. Sal 45.4 (5); 72.1-4; 110.2.; #2.9 Ap 2.27-28; 12.5; 19.15.]

¡los harás pedazos como a ollas de barro!»

10Reyes y gobernantes de la tierra, entiendan esto,

¡aprendan bien esta lección!

11-12Adoren al Señor con alegría y reverencia;

inclínense ante él con temblor,

no sea que se enoje

y ustedes mueran en el camino,

pues su furor se enciende fácilmente.

¡Felices los que buscan protección en él!

Texto © Sociedades Bíblicas Unidas, 1994.
Published by: United Bible Societies