San Juan 11

1ESTABA entonces enfermo uno llamado Lázaro, de Bethania, la aldea de María y de Marta su hermana.[#Mt. 21.17.; #Lc. 10.38,39.]

2(Y María, cuyo hermano Lázaro estaba enfermo, era la que ungió al Señor con ungüento, y limpió sus pies con sus cabellos)[#Mt. 26.7. 12.3]

3Enviaron, pues, sus hermanas á él, diciendo: Señor, he aquí, el que amas está enfermo.

4Y oyéndolo Jesús, dijo: Esta enfermedad no es para muerte, mas por gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella.[#9.3.]

5Y amaba Jesús á Marta, y á su hermana, y á Lázaro.

6Como oyó pues que estaba enfermo, quedóse aún dos días en aquel lugar donde estaba.[#10.40.]

7Luego, después de esto, dijo á los discípulos: Vamos á Judea otra vez.

8Dícenle los discípulos: Rabbí, ahora procuraban los Judíos apedrearte, ¿y otra vez vas allá?[#8.59 y 10.31.]

9Respondió Jesús: ¿No tiene el día doce horas? El que anduviere de día, no tropieza, porque ve la luz de este mundo.[#9.4.]

10Mas el que anduviere de noche, tropieza, porque no hay luz en él.[#12.35.]

1 Jesús llega á Bethania.

2 “Lázaro, ven fuera.”

11Dicho esto, díceles después: Lázaro nuestro amigo duerme; mas voy á despertarle del sueño.[#2 S. 7.12. Mt. 27.52.]

12Dijeron entonces sus discípulos: Señor, si duerme, salvo estará.

13Mas esto decía Jesús de la muerte de él: y ellos pensaron que hablaba del reposar del sueño.

14Entonces, pues, Jesús les dijo claramente: Lázaro es muerto;

15Y huélgome por vosotros, que yo no haya estado allí, para que creáis: mas vamos á él.

16Dijo entonces Tomás, el que se dice el Dídimo, á sus condiscípulos: Vamos también nosotros, para que muramos con él.[#14.5 y 20.24,26-29 y 21.2.]

17Vino pues Jesús, y halló que había ya cuatro días que estaba en el sepulcro.[#6]

18Y Bethania estaba cerca de Jerusalem, como quince estadios;

19Y muchos de los Judíos habían venido á Marta y á María, á consolarlas de su hermano.

20Entonces Marta, como oyó que Jesús venía, salió á encontrarle; mas María se estuvo en casa.

21Y Marta dijo á Jesús: Señor, si hubieses estado aquí, mi hermano no fuera muerto;

22Mas también sé ahora, que todo lo que pidieres de Dios, te dará Dios.

23Dícele Jesús: Resucitará tu hermano.

24Marta le dice: Yo sé que resucitará en la resurrección en el día postrero.[#5.29. Lc. 14.14.]

25Dícele Jesús: Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.[#6.39,40,44,54.; #14.6. Col. 3.4.]

26Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?[#8.51,52.]

27Dícele: Sí Señor; yo he creído que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, que has venido al mundo.[#Mt. 16.16.]

28Y esto dicho, fuése, y llamó en secreto á María su hermana, diciendo: El Maestro está aquí y te llama.

29Ella, como lo oyó, levántase prestamente y viene á él.

30(Que aun no había llegado Jesús á la aldea, mas estaba en aquel lugar donde Marta le había encontrado.)

31Entonces los Judíos que estaban en casa con ella, y la consolaban, como vieron que María se había levantado prestamente, y había salido, siguiéronla, diciendo: Va al sepulcro á llorar allí.

32Mas María, como vino donde estaba Jesús, viéndole, derribóse á sus pies, diciéndole: Señor, si hubieras estado aquí, no fuera muerto mi hermano.

33Jesús entonces, como la vió llorando, y á los Judíos que habían venido juntamente con ella llorando, se conmovió en espíritu, y turbóse,

34Y dijo: ¿Dónde le pusisteis? Dicenle: Señor, ven, y ve.

35Y lloró Jesús.

36Dijeron entonces los Judíos: Mirad cómo le amaba.

37Y algunos de ellos dijeron: ¿No podía éste que abrió los ojos al ciego, hacer que éste no muriera?[#9.6,7.]

38Y Jesús, conmoviéndose otra vez en sí mismo, vino al sepulcro. Era una cueva, la cual tenía una piedra encima.[#Mt. 27.60. 20.1]

39Dice Jesús: Quitad la piedra. Marta, la hermana del que se había muerto, le dice: Señor, hiede ya, que es de cuatro días.

40Jesús le dice: ¿No te he dicho que, si creyeres, verás la gloria de Dios?[#25,26; #4]

41Entonces quitaron la piedra de donde el muerto había sido puesto. Y Jesús, alzando los ojos arriba, dijo: Padre, gracias te doy que me has oído.

42Que yo sabía que siempre me oyes; mas por causa de la compañía que está alrededor, lo dije, para que crean que tú me has enviado.[#12.30.]

43Y habiendo dicho estas cosas, clamó á gran voz: Lázaro, ven fuera.

44Y el que había estado muerto, salió, atadas las manos y los pies con vendas; y su rostro estaba envuelto en un sudario. Díceles Jesús: Desatadle, y dejadle ir.[#19.40.]

45Entonces muchos de los Judíos que habían venido á María, y habían visto lo que había hecho Jesús, creyeron en él.[#2.23 y 12.18.]

1 Profecía de Caifás.

2 María unge los pies de Jesús.

46Mas algunos de ellos fueron á los Fariseos, y dijéronles lo que Jesús había hecho.[#57]

47Entonces los pontífices y los Fariseos juntaron concilio, y decían: ¿Qué hacemos? porque este hombre hace muchas señales.[#Mt. 26.3.]

48Si le dejamos así, todos creerán en él: y vendrán los Romanos, y quitarán nuestro lugar y la nación.

49Y Caifás, uno de ellos, sumo pontífice de aquel año, les dijo: Vosotros no sabéis nada;[#18.13.]

50Ni pensáis que nos conviene que un hombre muera por el pueblo, y no que toda la nación se pierda.

51Mas esto no lo dijo de sí mismo; sino que, como era el sumo pontífice de aquel año, profetizó que Jesús había de morir por la nación:

52Y no solamente por aquella nación, mas también para que juntase en uno los hijos de Dios que estaban derramados.[#Is. 49.6. 1 Jn. 2.2.; #10.16.]

53Así que, desde aquel día consultaban juntos de matarle.

54Por tanto, Jesús ya no andaba manifiestamente entre los Judíos; mas fuése de allí á la tierra que está junto al desierto, á una ciudad que se llama Ephraim: y estábase allí con sus discípulos.[#7.1 y 12.36.]

55Y la Pascua de los Judíos estaba cerca: y muchos subieron de aquella tierra á Jerusalem antes de la Pascua, para purificarse;[#2.13 y 6.4.; #Nm. 9.10. Hch. 21.14.]

56Y buscaban á Jesús, y hablaban los unos con los otros estando en el templo. ¿Qué os parece, que no vendrá á la fiesta?

57Y los pontífices y los Fariseos habían dado mandamiento, que si alguno supiese dónde estuviera, lo manifestase, para que le prendiesen.

Reina-Valera 1909 - Dominio público. Fue realizada por Sociedades Bíblicas Unidas y publicada por primera vez en 1909.
Published by: United Bible Societies