Salmos 29

Salmos 29

La poderosa voz de Dios

SALMO 29 (28)

1-21-2 (1b-2) Ustedes, que en el cielo

están al servicio de Dios,

denle la honra que merece,

reconozcan su poder

y adórenlo en su hermoso templo.

3La voz de nuestro Dios,

Dios de la gloria ,

retumba como el trueno

sobre los grandes océanos.

4La voz de nuestro Dios retumba con fuerza;

la voz de nuestro Dios retumba con poder.

5La voz de nuestro Dios derriba los cedros;

nuestro Dios derriba los cedros del Líbano.

6A los montes Líbano y Hermón

los hace saltar como terneros,

¡como si fueran toros salvajes!

7La voz de nuestro Dios

lanza llamas de fuego;

8la voz de Dios sacude el desierto;

¡nuestro Dios sacude el desierto de Cadés!

9-10La voz de Dios retuerce los robles

y deja sin árboles los bosques.

Nuestro Dios es el rey de las lluvias;

él se sienta en su trono

para reinar por siempre.

En su templo todos lo alaban,

11y desde allí le pedimos

que nos llene de fuerzas

y nos bendiga con su paz.

Traducción en lenguaje actual ® © Sociedades Bíblicas Unidas, 2002, 2004.
Published by: United Bible Societies