Salmos 65

Salmos 65

Dios nos llena de bendiciones

SALMO 65 (64)

11 (2) Dios mío,

que vives en el monte Sión,

tú mereces nuestras alabanzas;

mereces que te cumplamos

las promesas que te hacemos.

2-32-3 (3-4) Tú escuchas nuestra oración.

Estamos cansados de pecar ,

por eso acudimos a ti.

Nuestros pecados nos dominan,

pero tú nos perdonas.

44 (5) ¡Qué bendición reciben

los que viven cerca de ti,

los que viven en tu mismo templo!

Quedamos satisfechos

con el alimento

que de ti recibimos.

55 (6) Nuestro Dios y salvador,

tú nos respondes

dándonos la victoria.

Gente de pueblos lejanos

pone en ti su confianza.

Así hacen los que viven

más allá del mar.

66 (7) Tú, con tu poder y tu fuerza,

formaste las montañas.

77 (8) Calmaste el rugido de los mares,

calmaste el estruendo de sus olas,

calmaste el alboroto de los pueblos.

88 (9) Los que viven en países lejanos

tiemblan de miedo

al ver tus grandes maravillas;

del oriente al occidente,

haces que la gente grite de alegría.

9-109-10 (10-11) Tú tienes cuidado de la tierra:

la empapas con abundante lluvia

y riegas los sembrados

para que den muchos frutos.

Con la lluvia aflojas la tierra

y la preparas para la siembra.

Llenas de agua los grandes arroyos,

y haces brotar nuevas ramas.

Así dejas listo el campo

para que todos tengamos trigo.

1111 (12) Llega el año a su fin

y está lleno de bendiciones;

por dondequiera que pasas

dejas gran abundancia.

1212 (13) En el desierto, el pasto es fresco;

las colinas se revisten de alegría,

1313 (14) las praderas se llenan de ovejas,

y los valles se cubren de trigales.

¡Todo el mundo canta

y lanza gritos de alegría!

Traducción en lenguaje actual ® © Sociedades Bíblicas Unidas, 2002, 2004.
Published by: United Bible Societies