1 SAMUEL 8

1 SAMUEL 8

II. Samuel y Saúl (8–15)

Israel pide un rey

1Cuando Samuel se hizo viejo nombró a sus hijos jueces de Israel.

2El primogénito se llamaba Joel y el segundo Abías, y ambos ejercían en Berseba.

3Sin embargo sus hijos no siguieron sus pasos, pues buscaban su provecho, aceptaban sobornos y pervertían la justicia.

4Por ello, todos los ancianos de Israel se reunieron, fueron a Ramá a ver a Samuel

5y le dijeron:

—Mira, tú ya eres viejo y tus hijos no siguen tus pasos. Por tanto, nómbranos un rey que nos gobierne, como en todas las naciones.

6Le disgustó a Samuel el hecho de que le pidieran un rey para que los gobernara y se puso a orar al Señor.

7Pero el Señor le dijo:

—Escucha la voz del pueblo en todo lo que te pidan, pues no te rechazan a ti, sino que es a mí a quien rechazan como rey suyo.

8Lo mismo que me han tratado a mí desde que los saqué de Egipto hasta hoy, abandonándome para dar culto a otros dioses, así te tratan también a ti.[#1 Re 9,9.]

9Ahora, pues, escúchalos; pero ponlos sobre aviso y dales a conocer los privilegios del rey que reinará sobre ellos.

10Samuel transmitió las palabras del Señor a la gente que le pedía un rey

11y les dijo:

—Estos serán los derechos del rey que los gobierne: alistará a los hijos de ustedes y a unos los destinará a sus carros y a sus caballos para que vayan delante de su carroza;

12a otros los nombrará jefes y oficiales de su ejército; a otros los pondrá a trabajar sus campos y a cuidar sus cosechas, o a fabricar su armamento y los pertrechos de sus carros.

13A las hijas de ustedes las pondrá a su servicio como perfumistas, cocineras o panaderas.

14Requisará sus mejores campos, viñas y olivares para dárselos a sus funcionarios.

15Les cobrará a ustedes el diezmo de sus cereales y viñas y se lo dará a sus oficiales y funcionarios.

16Les quitará sus siervos y siervas junto con sus mejores bueyes y asnos para emplearlos en sus trabajos.

17Les exigirá impuestos por sus rebaños, y ustedes mismos se convertirán en sus esclavos.

18En ese momento ustedes se quejarán del rey que habían elegido, pero entonces el Señor no les responderá.[#Mi 3,4.]

19El pueblo no quiso escuchar a Samuel e insistió:

—¡No importa! Queremos tener rey.

20Así también nosotros seremos como todos los pueblos: nuestro rey nos gobernará y nos conducirá a luchar en las guerras.

21Samuel escuchó lo que decía el pueblo y se lo comunicó al Señor.

22El Señor le contestó:

—Atiende a su petición y nómbrales un rey.

Entonces Samuel ordenó a los israelitas:

—¡Todo el mundo a sus pueblos!

La Palabra (BLPH) versión hispanoamericana Copyright © Sociedad Bíblica de España, 2010 Utilizada con permiso
Published by: Bible Society of Spain