Salmos 60

SALMO 60 (59)

Oración en que se pide la ayuda divina

(Sal 108.7-14)

3En tu enojo, oh Dios, nos has abandonado,

nos has deshecho;

¡devuélvenos ahora nuestra fuerza!

4Hiciste que la tierra temblara y se abriera;

¡cierra ahora sus grietas, pues se desmorona!

5Has hecho pasar a tu pueblo duras pruebas,

nos has dado un vino que enloquece.

6Diste a los que te honran la señal

para que escaparan de las flechas.

7¡Respóndenos, sálvanos con tu poder!

¡Libera a los que amas!

8Dios ha dicho en su santuario:[#60.8 es decir, en el lugar donde Dios se hace presente y comunica su palabra. Otra posible traducción: por su santidad.]

«¡Con qué alegría dividiré Siquem

y repartiré el valle de Sucot!

9Galaad y Manasés me pertenecen;

Efraín es el casco que cubre mi cabeza;

Judá es mi bastón de mando;

10Moab es la palangana en que me lavo;

sobre Edom arrojaré mi sandalia;

¡gritaré de triunfo sobre los filisteos!»

11¿Quién me llevará a la ciudad amurallada?

¿Quién me guiará hasta Edom?

12Pues tú, oh Dios, nos has rechazado;

¡no sales ya con nuestras tropas!

13Ayúdanos contra el enemigo,

pues nada vale la ayuda del hombre.

14Con la ayuda de Dios haremos grandes cosas;

¡él aplastará a nuestros enemigos!

Texto Bíblico: Dios habla hoy © Sociedades Bíblicas Unidas, 1966, 1970, 1979, 1983, 1994.
Published by: United Bible Societies